lunes, 15 de abril de 2013

Capítulo 87.

Hola pequeñas y pequeños.

El sábado estuve en casa y, por la noche, me puse a hablar con Cassie, una westera. Sobre chicos, sobre filosofías de que la mujer no es inferior al hombre, pero tampoco superior; sencillamente merecemos un lugar en lo más destacado del poder, como todos los hombres.
El caso es que me empezó a contar que un chico le había dicho que le gustaba pero que también le gustaba otra chica; este hablaba con ambas pero ella se sentía insegura por el mero hecho de que la otra chica era más guapa, más delgada y con ella se reía más.
Yo empecé a decirle que no tenía de qué preocuparse; no todo en esta vida es cuerpo y que ella tenía algo más que la otra chica. Todo esto hasta que, de pronto, me acordé de Sumi.
Le comencé a relatar qué había pasado con él, que ocurría, TODO. Al final, le comenté que para mi cumpleaños me había regalado un libro:
Yo: Pero no un libro cualquiera. Una edición del 99 en perfecto estado de El Silmarillion de J.R.R. Tolkien. El cual le tenía cariño porque se lo había regalado su primera novia y le había hecho redescubrir el amor y el cariño por los libros.
Cassie: Vaya. Pienso que podría estar pillado de ti.
Yo: Que va. Siempre me ha dicho que más allá de los libros y el sexo, no hay más.
Cassie: Entonces es un insensible.
Yo: Jamás. Los libros son su sentimientos y emociones. Los libros son todo él. Puede que no tenga corazón pero los libros son todo cuanto ama, desea y siente.
Cassie: Entonces es lo que yo digo. Lo que pasa que el muy idiota intenta convencerse de que no le gustas. Te ha separado de él para no seguir sintiendo eso. A veces pasa.
Yo: Pero no a mí. No con él.
Cassie: ¿Por qué?
Yo: Ya te lo he dicho. Es un chico con el que me he acostado durante meses y, un buen día, dejó de llamarme para ello, incluso dejó de hablarme. Y, hace poco, me dijo qué quería por mi cumpleaños. Yo le contesté que un libro de Tolkien. Aunque luego le dije que para mi cumpleaños quedaba mucho, que hasta el 4 de Julio nada. Y él me dijo: Vale. Ya tienes mi Silmarillion prestado. Quedátelo. Y me contó la historia que había detrás y quise devolvérselo, no quería quedármelo; es un libro que no merezco tener. Pero ya era tarde.
Cassie: Está colado.
Yo: Había pensado en forrarlo para que no se estropee.
Cassie: Estaría bien.
Yo: Lo peor es que durante muchos meses me ha gustado, incluso ahora me gusta. Pero el negó cualquier tipo de relación salvo la sexual y literaria.
Cassie: Pues ya ves. Para mí está claro.
Yo: Pero es que a partir de lo del libro, no hemos vuelto a hablar y, si me ve, casi, casi huye.
Cassie: Pues perfectamente puede ser eso. Le da miedo involucrarse pero no puede evitarlo.
Yo: Él sabe que me gusta. ¿Por qué no se lanza, corcho? >.<
Cassie: Porque le da miedo enamorarse. No tú, sino enamorarse tal cual.
Yo: Creo que directamente está enamorado de mis libros y no de mí. Se parece a Rodrik Harlaw (personaje de CdHyF). xD

No lo sé. Vuelvo a rayarme la cabeza de nuevo.
Encima, en twitter, tengo a un chico de 19 encima mía para que seamos novios. No me conoce pero, según él, yo le gusto. A mí me parece un chico agradable y demás pero no le quiero como para ser una pareja.
¿POR QUÉ LOS TÍOS SON TAN RAROS?

Un besazo. :3

2 comentarios:

  1. Algunas veces la atracción y el deseo están presentes; se es consciente de ello, pero a la vez de lo que cada uno quiere. Bien dices que tú no lo quieres como pareja, quizá el tampoco te vea así (aunque eso no es incompatible con la existencia de otros sentimientos). Simplemente algunas veces se sabe que el avanzar destrozaría lo que ya existe y se valora demasiado esa relación como para echarla a perder.

    Anexo: Me siento fatal cuando veo lo de una edición del Silmarillion del 99 en perfecto estado... ¡¡El 99% de mis libros son bastantes más antiguos!! Ese me lo leí en el 93 (y ya tenía años entonces).

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  2. no te ralles, los tios son raros y punto.

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